| carlos espadas | Tuesday, May 15, 2012 |
Hola buenos días a todos aquellos que se han tenido que ir de nuestra Venezuela que como yo por la imposibilidad de poder seguir manteniéndose fieles a los principios y valores y por darle a sus hijos la posibilidad de poder seguir viviendo sin el temor de la inseguridad en la que un malandro pueda tener en sus manos la decisión si vives ó mueres y el Gobierno en vez de trabajar para reducir esa lacra la estimula y la promueve para que el temor y el miedo se conviertan en el terror que atenaza y mantiene a raya a la sociedad que lucha y trabaja y que más que eso sobrevive a esas circunstancias tan adversas. No sé si la carta de declaración de Caracas ciudad de despedidas sea ó no una manipulación propagandística pero yo si me identifico con su enunciado y es por eso que me he sentido motivado a enviarles esta carta que les escribí a mis hijos cuando me plantearon la pregunta de por qué nos tuvimos que ir de nuestra Venezuela. Soy un Venezolano de corazón y no le deseo la muerte a nadie ni siquiera a él a Chávez. Y si es verdad que a Chávez le queda poco tiempo de vida ojalá tuviera un momento de lucidez y reconociera sus errores se arrepintiera de ellos rectificara su conducta y volviera a recuperar el liderazgo con el que barrió a los dos partidos que se turnaban en la corrupción a ver quién robaba más. Él era la luz en el túnel era la esperanza de muchísimos venezolanos eran tan genuinas y veraces sus expresiones a la luz de lo que nos estaba pasando que la gente el pueblo se volcó a su favor. Yo voté por ti Chávez yo creí en ti y tú me defraudaste y me engañaste como lo has hecho con tantísimos que hicimos lo mismo confiar en ti. Solamente hay que echar la vista atrás y ver la Venezuela que encontraste hace 12 años 12 LARGOS AÑOS y ver ahora la Venezuela que vas a dejar. De qué te puedes sentir orgulloso de que puedes presumir a quién le podrás echar la culpa de tener más ranchos que antes de vidas infrahumanas de un aumento del malandraje y de la delincuencia desbordada de unos poderes públicos corrompidos de una corrupción sin precedentes de unas instalaciones de los servicios básicos como el agua y la luz eléctrica en la carraplana y ni hablar de Pedevesa ó de haber permitido la penetración de una cubanización que ahora no solo controla a los venezolanos sino que también te controla a ti… a quién le podrás culpar de todo esto si lo has tenido todo a tu favor y bajo tu absoluto control manejando a tu antojo inmensas cantidades de dinero no podrás responsabilizar a nadie porque todo eso lo has cometido tu y tus incondicionales que vamos a ver a donde escapan de la quema cuando tu desaparezcas… Si verdaderamente crees en ese Dios que invocas a que te ayude en tu enfermedad creo que la única ayuda que deberías de implorar sería la de poder morir en paz con tu alma y con tu gente con tu pueblo que no son solo los que te aplauden y te siguen sino todos los venezolanos y deberías de meditarlo un poco pues como creyente cristiano que parece que eres sabrás que el alma no muere y eso de estar retorciéndose eternamente no debe de ser nada bonito ni agradable. Deberías de procurar en lo que te quede de vida pedirle a todos los venezolanos de bien hermanarse de nuevo como éramos antes cuando no sentíamos odio entre nosotros mismos ese odio que lo has sembrado tu ó es que tu eres mejor venezolano que yo y que todos los demás que no acepten las cosas que estás haciendo. Quién te crees que eres, de quién recibes ese poder que ostentas la verdad es que eres un pobre mortal como todos los demás y eso lo vas a descubrir en tus últimos alientos de vida si no recapacitas antes todavía estás a tiempo nunca es tarde si el arrepentimiento y la rectificación es sincera y profunda y ten por seguro que el pueblo venezolano es tan noble y magnánimo que sabrá perdonarte si tu rectificas. Te recomiendo que te leas la parábola del Hijo pródigo del Apóstol San Lucas. Y te dedico las mismas máximas que les dedico a mis hijos en su carta y que yo heredé de mi papá que él las heredó de mi Abuelo y que yo se las transmito a mis hijos para que ellos las puedan transmitir también. No son nada del otro mundo pero son lo suficientemente válidas y veraces para cuando llegue la hora de la despedida poder despedirte en paz con Dios consigo mismo y con la gente con la que te ha tocado vivir en este mundo. No quieras para los demás lo que no quieras para ti…. Haz bien y no mires a quien…. Por tus obras te conocerán y en tu caso también te juzgarán. Te deseo que puedas vivir lo suficiente para que puedas rectificar puedas sentir el regocijo y la emoción de recibir el perdón de tu pueblo al desterrar el odio que nos has impuesto y poder morir en paz. Sin rencor pero con asertividad de un venezolano que como tantísimos otros confiamos en ti. Carlos Espadas Albiol.
CARTA A MIS HIJOS.
Ale, Litos y Gracy este relato les hará reflexionar de el porqué nos vinimos para España. Nosotros somos VENEZOLANOS ustedes nacieron en Venezuela y aunque yo no haya nacido en Venezuela la siento muy fuerte dentro de mí. Hay situaciones en la vida en las que como les decía el otro día hay que tomar decisiones y mami y yo decidimos irnos de nuestra Venezuela dejándolo todo allá nuestras posesiones materiales y también a nuestros seres queridos y amigos y también nuestros más profundos sentimientos de arraigo y de pertenencia y lo hicimos pensando en que nuestros hijos trían más oportunidades en la vida de formarse y progresar como personas y como profesionales en lo que se decidieran a emprender aquí y no en Venezuela ya que allá la violencia la inseguridad y la injusticia social se los pondría muy difícil con el riesgo añadido de hasta poder perder la vida en el intento. La gran tristeza de ver como van desapareció los valores de un pueblo como a la gente más pobre y humilde se la humilla y se la te aprovechándose de su condición de extrema pobreza y de grandes carencias sobre todo de educación de formación y de conocimiento con lo que se consigue invertir el orden de los principales valores y destruir poco a poco el espíritu de la persona manipulándola y secuestrando sus capacidades de decisión de iniciativa propia y de percepción de la realidad y de superación por medio del esfuerzo el mérito y la constancia. Nada de eso le interesa al régimen actual ya que eso significaría estudio formación y capacitación que en definitiva sería un esfuerzo y sacrificio de la persona que después tría su compensación al incorporarse a la vida desarrollando una actividad productiva y con unos niveles de conocimiento y experiencia difíciles de poder manipular ó engañar porque sencillamente no se aceptaría ni se permitiría ni se soportaría la ACTUAL SUMISIÓN a la que se ve metido el pueblo de Venezuela los que están a favor por su POBREZA MENTAL y los que están en contra por el TERROR a que están metidos con la amenaza constante e indefesión con que se les acecha tanto por el gobierno como por el malandraje y el hampa desbordado y sin control. Yo también siento que abandonamos un barco que se está hundido en vez de quedarnos para ayudar a reflotarlo pero eso supondría sacrificarnos todos por una gran causa digna y legítima llamada VENEZUELA que en realidad era nuestro HOGAR y quien no lucharía por su hogar… Una persona lucha por su hogar cuando tienes el ejemplo y el respaldo de aquellos que gobiernan y que te lo piden y te dan las armas necesarias para que lo desafíes pero cuando esos mismos que gobiernan son los que violan tu hogar te lo saquean y te lo queman no te queda NADA QUE DEFENDER y antes que irte te vas y renuncias a la lucha por esa sensación de impotencia ante la indefesión total. Hijos quiero transmitirles un sentimiento para que me entiendan mejor el cual es una mezcla de profunda admiración respeto solidaridad y reconocimiento con nostalgia tristeza y frustración por las personas y seres queridos que quedaron allá algunos luchando por sobrevivir y otros murió por nada cuando la nada en el más amplio sentido de la falta de condiciones favorables de vida es casi todo lo que les rodea. No son héroes ni líderes son seres humanos sufrió las consecuencias de la desidia la ingratitud el abuso y el abandono a que fue sometido ese gran sector de pobreza y miseria que mal vivía en nuestra Venezuela y que muchos no querían ver y ahora a algunos de ellos les falta el valor y la sinceridad de la autocrítica para reconocer lo que dejaron de hacer y lo que hicieron terriblemente mal. Para que esto sirviera de reconciliación y consenso que se necesita más que nunca para lograr la unidad de voluntades y desaparecería así como por arte de magia el enfrentamiento y la división de la sociedad que es lo que mantiene en el poder al corrupto y cruel régimen actual y esa unión es lo que se le volvería en su contra y en un solo bloque humano que una vez despierto les haría temblar y desaparecer del mapa. Recuerden las tres máximas del Abuelo Frutos manteniéndolas sentirán siempre su conciencia serena feliz y tranquila. No quieras para los demás lo que no quieras para ti. Haz bien y no mires a quien. Por tus obras te conocerán. Vuestro papá Carlos. Madrid 12 de Julio de 2009.
¡Colombia, pasión y libertad! 